Siempre está presente, cada día, mi pro ceso de adolescentes. Han pasado seis años, seis años en los que he crecido, he madurado, he aprendido a verle el valor a la vida, a mi vida. Para mí, vivir este proceso es hasta el día de hoy una experiencia única.
A los 13 años tenía muchos temores, miedos y la relación con las dos personas más importantes en mi vida no era la que quería para mí; esto influía en mis relaciones personales, con el resto de mi familia, con mis compañeros y mi entorno.
Fue ahí donde viví mi proceso, donde apliqué las herramientas que tanto buscaba para lograr mis sueños, para hacer algo distinto.
Todo estaba dentro de mí y no le había prestado atención.Hoy estoy estudiando y trabajando en lo que me apasiona, cada día es una nueva oportunidad para aprender y hago todo lo necesario para ir atravesando mis barreras, atravesar lo que frena y disfrutar mis logros y el día a día.Como adolescente logro todo lo que sueño, creo en mí y sé que si me lo propongo, si pongo mi corazón, lograré lo que tanto sueño.
Este proceso me abrió puertas valiosas y con orgullo puedo decir que soy una mujer libre, humilde, arriesgada, me la juego al 100% y transparente!Mi amor incondicional se queda con mi equipo, con Life, con personas INCREIBLES, ESPECIALES, MARAVILLOSAS que tienen un lugar enorme en mi corazón. Nosotros los adolescentes, podemos hacer la diferencia, está en nosotros el futuro, el seguir construyendo un futuro donde todo lo negativo se quede en el pasado y valoremos el presente, el ahora!!
Alejandra Vargas – Antorcha 4
